Vistas a la página totales

miércoles, 29 de enero de 2025

Amor que excede todo entendimiento

 Un amor que transforma corazones y sobrepasa todo entendimiento

El amor de Dios es un misterio insondable, una realidad que trasciende nuestra comprensión humana y que solo puede ser experimentada en su plenitud a través de una relación genuina con Él. En Efesios 3:19, el apóstol Pablo escribe: "y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios". Estas palabras nos invitan a sumergirnos en la inmensidad del amor divino y a recibirlo como la fuente de nuestra verdadera plenitud.

Un Amor más allá de nuestra comprensión

El amor humano, por más profundo y sincero que sea, está sujeto a limitaciones. Somos propensos a condicionar nuestro amor según circunstancias, emociones o la respuesta de los demás. Sin embargo, el amor de Dios es inmutable, eterno y perfecto. No depende de nuestra fidelidad, sino de su naturaleza misma.

Este amor fue revelado en su máxima expresión a través de Jesucristo. Como nos dice Romanos 5:8: "Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros". Dios nos amó primero, sin esperar nada a cambio, y su amor sigue siendo la fuerza que nos sostiene y nos transforma.

La plenitud de Dios en el amor

Cuando comprendemos y aceptamos este amor que excede todo conocimiento, nuestras vidas son renovadas. Nos llena de paz en medio de las tormentas, nos fortalece en nuestra debilidad y nos impulsa a amar a otros de manera desinteresada. El amor de Dios no solo nos salva, sino que también nos capacita para vivir conforme a su voluntad.

Pablo ora para que los creyentes sean "arraigados y cimentados en amor" (Efesios 3:17). Esto significa que nuestra fe debe estar fundamentada en la convicción del amor divino. No podemos depender de nuestra propia sabiduría o entendimiento; necesitamos rendirnos a un amor que va más allá de lo que la mente puede captar y que solo puede ser abrazado por el corazón.

Un llamado a experimentar y compartir este amor

Dios nos invita no solo a conocer su amor, sino a experimentarlo y compartirlo. En 1 Juan 4:7-8 se nos recuerda: "Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios. El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor".

Nuestro llamado como creyentes es reflejar este amor en nuestras relaciones, en nuestro servicio y en nuestro diario vivir. Así como Dios nos amó sin reservas, así también debemos extender ese amor a los demás, sin condiciones ni barreras.

Conclusión 

El amor de Dios es un océano sin límites, un amor que excede todo conocimiento y que nos invita a confiar plenamente en Él. En un mundo donde el amor muchas veces se mide y se condiciona, Dios nos ofrece un amor inagotable y eterno.

Que nuestro anhelo sea conocer cada día más este amor y vivir en su plenitud, reflejándolo a quienes nos rodean. Como dice Efesios 3:20-21: "Y a aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros, a él sea gloria en la iglesia en Cristo Jesús por todas las edades, por los siglos de los siglos. Amén".


Si te sirve, comparte!


SALMOS 1:1 | SALMOS 1:2 | SALMOS 1:3 | SALMOS 1:4 |



«Amémonos unos a otros»

Amar a los demás.



"Encarnación: Ciudad de Dios"


Frase Cristiana (FC)
PARAGUAY DIOS TE BENDIGA
En este blog no se recopila información privada. Ver más detalles y Política de Privacidad.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario